Se hallaba tendido en una chaise-longue, y
tenía en su blanca mano una rosa sin perfume.
O. Mirreau
Cuando un poema me llama la atención
de manera grata, primero lo leo y disfruto,
luego trato de compartirlo con aquellos que
considero saben apreciarlo, y éste es el medio
idóneo para ello... y lo hago trayendo a mi blog
unos párrafos de Ana Rossetti, extraídos de uno
de sus libros con el nombre que dá a ésta entrada
a mí particularmente me fascina su escritura:
------------()----------
Es tan adorable introducirme
en su lecho, y que mi mano viajera
descanse, entre sus piernas, descuidada,
y al desenvainar la columna tersa
-su cimera encarnada y jugosa
rendirá el sabor de las fresas, picante-
presenciar la inesperada expresión
de su anatomía que no sabe usar,
mostrarle el sonrojado engarce
al indeciso dedo, mientras en pérfidas
y precisas dósis se le administra
audacia. Es adorable pervertir
a un muchacho, extraerle del vientre
virginal esa rugiente ternura
tan parecida al estertor final
de un agonizante, que es imposible
no irlo matando mientras eyacula.
tenía en su blanca mano una rosa sin perfume.
O. Mirreau
Cuando un poema me llama la atención
de manera grata, primero lo leo y disfruto,
luego trato de compartirlo con aquellos que
considero saben apreciarlo, y éste es el medio
idóneo para ello... y lo hago trayendo a mi blog
unos párrafos de Ana Rossetti, extraídos de uno
de sus libros con el nombre que dá a ésta entrada
a mí particularmente me fascina su escritura:
------------()----------
Es tan adorable introducirme
en su lecho, y que mi mano viajera
descanse, entre sus piernas, descuidada,
y al desenvainar la columna tersa
-su cimera encarnada y jugosa
rendirá el sabor de las fresas, picante-
presenciar la inesperada expresión
de su anatomía que no sabe usar,
mostrarle el sonrojado engarce
al indeciso dedo, mientras en pérfidas
y precisas dósis se le administra
audacia. Es adorable pervertir
a un muchacho, extraerle del vientre
virginal esa rugiente ternura
tan parecida al estertor final
de un agonizante, que es imposible
no irlo matando mientras eyacula.