Si supieras cuanto te extraño,
en ésta acíaga y tediosa tarde de invierno
me envuelve la melancolía porque no te veo,
porque de tí no sé nada,
enfermando de tristeza porque no te tengo
muriendo de nostalgia,
porque ahora más que nunca te deseo.
Quiero imaginarte sola,
recostada sobre tu desbaratada cama,
con la mirada perdida
en un punto distante del inmenso cielo,
o, quizas postrada tras la ventana
contemplando cómo cae la lluvia
la arboleda y las calles mojadas,
sin otra compañía que el humo
de tu cigarrillo, o la insistente sintonía
del viento, la lluvia y el agua.
Quiero imaginarte absorta, ausente,
y tu dedo guiado por un impulso lánguido
dejando un rastro húmedo
tras los opacos cristales impregnados
por el vaho que desprende tu cálido aliento,
envuelta en un aire viciado, rancio y
pesado en la fría soledad de tu alcoba
donde se alojan vivencias irrepetibles,
que rompieron la armonía y el sosiego
llenando de turbadora pasión y dicha
tu existencia anodina, disfrutando
de maravillosos y frenéticos encuentros.
Te imagino aguardándome de nuevo,
sobre tu lecho tendida, expectante, excitada,
gozando de mi presencia, cruzando nuestras miradas,
dispuesta a evocar momentos de esplendor y pasiones
que ya quedaron anclados en el recuerdo,
experiencias con deseos de ser rescatadas....
El deseo de tenerte
ResponderEliminarde sentirte
vuelve mis noches largas
y los días siempre inundada de tu recuerdo
En mi alcoba te siento
recorro suavemente el mapa que grabaste
a fuego intenso, ardiente
para llegar a tener tu aroma en mis sentidos
y desbordar en la pasión con tu recuerdo
delicada, húmeda siempre tuya
No puedo negar que me ha encantado
Besos Marengo
Con lo bien que imaginas.. ¿para qué más?
ResponderEliminarLas tardes tediosa de invierno, mi querido MARNGO ( si son aciagas muchísimo más) son armas terribles cuando se nos dispara la melancolía de los recuerdos.
ResponderEliminarTú lo describes de maravilla, pero ... sinceramente, si la persona a la que imaginas está tal cual la describes y siente tal cual dices que siente, dudo mucho muchísimo que eso que os hace recordaros, esté anclado en el pasado...
Será invierno, pero en vosotros está en plena ebullición la primavera:-)
Muuuchos besos MARENGO y... siempre mil gracias.
Querido Marengo la ausencia siempre duele, pero con tus letras creas un hermoso poema, aun en simples cosas como escribir sobre un vidrio humedo
ResponderEliminarAbrazo
Joderrrrr Marengo! Contagias tu melancolia,lo sabias?
ResponderEliminaratlanl
Otra vez melancólico.
ResponderEliminarbesos.
Llegarán tiempos mejores Marengo.
ResponderEliminarNo te preocupes.
Bueno, te lo dije, un abrazo.
EliminarBesos.
Por si tienen razón quienes te suponen triste o melancólico y como además he sido un desastre completo en mi blog ( perdón) y allí no te di las gracias tal cual merecías, para compensar y por si necesitas compañía te dejo a tooodo el blog lleno de sirenas para que te hagan compañía :-)
ResponderEliminarMuuuuchos besos MARENGO y mil gracias ¿sonríes verdad?...Mmmm sé que sí, me gusta imaginarte sonriente:))
Feliz día para ti.
La imaginación es un buen escape ante la depresión y el mejor refugio para las cosas del corazón.
ResponderEliminarLindo y sentido poema, Marengo!!!
Besos y mi abrazo de alitas.
Menuda descripción tan intensa Marengo, casi se podría decir que no es la imaginación, sino la propia vivencia, espectaculares tus letras, un abrazo.
ResponderEliminarTu imaginación es el deseo de la piel, es hermoso que te piensen así!! Besote
ResponderEliminarMelancolicos recuerdos que te llevan de la mano a recordar momentos vividos de intensa pasión.
ResponderEliminarMe ha encantado tu poema.
Besos.
Lunna.